Organismos genéticamente modificados: Cadenas de comida rápida

Organismos genéticamente modificados (Cadenas de comida rápida)

Cierto es que no sabemos lo que estamos comiendo. La información sobre semillas, modos de cultivo o el proceso industrial que ha sufrido cualquier producto que ingerimos, realmente lo desconocemos. Con la tecnología y los avances que hoy en día se tienen en todas las áreas de crianza de animales, producción y manejo de alimentos, es fácil obtener mucho más por menos. Ahora, ¿qué tanto el “menos” sigue siendo éticamente permitido dentro de la industria alimenticia? Me explicaré, pero antes que nada, hablaré un poco sobre lo que hoy en día se conoce como alimentos transgénicos, o modificados genéticamente, la rama de los organismos modificados genéticamente que los humanos consumimos. En específico, los animales transgénicos son aquellos que poseen un gen que no les pertenece.
El objetivo de la obtención de animales transgénicos, es decir, de implementar genes que originalmente no se encuentran en la estructura genética de cierta especie es buscar que este nuevo gen codifique cierta proteína deseada y que se obtenga nuevos compuestos que mejoren la calidad del producto que se busca extraer. Un ejemplo del empleo de esta técnica es la creación de vacas transgénicas en Argentina. Son llamadas vacas Pampa y producen en su leche hormona de crecimiento humano. La creación de animales transgénicos presenta nuevas oportunidades, pero también crea nuevos desafíos. Entre las primeras está la posibilidad de estudiar la función de ciertas proteínas, incluidas algunas causantes de enfermedades humanas. Aunque la manipulación de genes puede traer muchas y variadas ventajas, es también muy cierto que dentro de esta nueva área, cruzar la delgada línea entre el mejoramiento de productos y la violación de los derechos animales y humanos, es muy fácil.
Existen numerosas empresas dedicadas a la rama de la comida rápida. Entre ellas encontramos dos de las más poderosas: McDonalds y KFC. Según Claudia Juliana Lucena Lizarazu del grupo de investigación en Geomática de la Universidad Industrial de Santander en España, estas dos empresas han modificado genéticamente tanto a los animales que utilizan para hacer sus alimentos, que han perdido las características físicas y metabólicas que los distinguen de otras especies. La carne que utilizan tanto McDonalds como KFC, no es carne de pollo ni de res, proviene de “unos bultos sin patas y sin cuernos, que son alimentados por medio de tubos conectados a sus estómagos y que de hecho no tienen huesos, sino un poco de cartílagos que nunca llegan a desarrollarse”
La manipulación genética de la cual son resultado, los convierte en animales casi inanimados. De igual forma, y lo más preocupante, dice Claudia Lucena es que las sustancias y toxinas que desarrollan estos organismos genéticamente modificados que crían McDonald's y KFC producen con el paso del tiempo daños irreversibles en la salud. Aunque todavía no existe un número grande de personas afectadas, se ha sabido que en lugares como Canadá, Australia y por supuesto Estados Unidos, grupos de científicos especializados en la materia, relacionan el consumo de alimentos en establecimientos de comida rápida con el síndrome de Alzheimer, entre otros muchos padecimientos cuyo origen parecía no estar relacionado con otras causas.
¿Será todo esto verdad o será invento de grupos vegetarianos que están en contra de la matanza de animales y que la gente ingenuamente (o nó) esta dispuesta a creer? Yo realmente no lo se. Se los dejo a su criterio.

Referencias:
http://aportes.educ.ar/biologia/nucleo-teorico/influencia-de-las-tic/manipulacion-y-reprogramacion-de-genes/animales_transgenicos.php