Se dice que nuestro universo realmente existe gracias a una coincidencia de sucesos.Georges Lemaître, propuso que el Universo se inició con la explosión de un átomo primigenio, lo que más tarde Fred Hoyle denominó "Big Bang". Durante los primeros momentos del Big Bang el Universo era un plasma muy caliente y denso, siendo una gran coincidencia ya que si no hubiera estado a la temperatura y presión adecuadas, no hubiera continuado con su expansión. Las coincidencias continuaron ya que el Universo experimentó un periodo de inflación cósmica, pasando a ser más estable, menos denso y con una disminución ideal de la temperatura para la formación de 4 fuerzas (fuerte, débil, electromagnética y gravitatoria) y posteriormente, la formación de átomos.
Ludlam y McLerran afirman que durante la primera centésima de segundo después del Big Bang existió un proceso llamado bariogénesis, en el cual, quarks y gluónes se unieron para formar bariones (protones y neutrones), los cuales al enfriarse pudieron formar el tipo de partículas de materia que observamos hoy en día (una coincidencia más). Coincidentemente también se produjo una asimetría entre la materia y antimateria, y esta mayor cantidad de materia permitió que no se aniquilaran ambas al entrar en contacto. Al pasar el tiempo, algunas regiones ligeramente más densas de la materia crecieron, haciéndose más densas y formando así, de pura coincidencia, nubes, estrellas y las primeras galaxias. Estas primeras “galaxias enanas” emitían la suficiente radiación como para deshacer sus átomos gaseosos. Sin embargo, la coincidencia de que este gas se estaba calentando y expandiendo dio como resultado la masa justa y necesaria para la formación de las grandes galaxias que conocemos.
Finalmente, no podemos dejar a un lado la coincidencia relacionada con la entropía, el desorden, ya que una de sus consecuencias es la muerte térmica una vez que la mayor parte de la materia se convierte en fotones y estos se diluyen. Sin embargo, la entropía fue anormalmente pequeña, pues de no ser así, el universo dejaría de existir.
Referencias:
Hawking, Stephen W. (1988). Historia del tiempo, p.166. Editorial Crítica.
1 comentario:
Harumi, excelente aportación, sólo que utilizar un lenguaje muy formal para el público al que va orientada tu aportación; relájate y que tu aportación parezca más una plática con tus compañeros que un reporte técnico.
Calificación = 10
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