domingo, febrero 18

Cuando se disparó el precio del maíz, un argumento por parte de los industriales fue que la cotización subió debido a la demanda de granos para fabricar etanol. Lo cual podría darnos a entender que ya estamos explotando fuentes de energía alterna de forma eficiente. Aunque esto no es del todo verdad, ya hay grandes esfuerzos encaminados en ese sentido.
La economía permite que tecnologías verdes entren al mundo del automóvil, aunque sea por moda. Por ejemplo Google apoya a todos sus empleados con cinco mil dólares en la compra de cualquier automóvil hibrido, lo cual ha dado como resultado que más del 80 % de los vehículos de sus trabajadores sean de este tipo.
Las celdas de hidrogeno, el biodiesel, las baterías de litio y la electricidad tomada de un contacto eléctrico de la casa son iniciativas cada vez más comerciales y que apuestan por un ecosistema más limpio y sano no contribuyendo al calentamiento global.

t.lammers

1 comentario:

Alicia dijo...

En mi opinión estoy de acuerdo en que poco a poco existan productos innovadores que remplazen a los que hacen daño a la capa de ozono o a factores que ayudan a evitar el calentamiento global, sin embargo deberían de desarrollar más este tipo de productos para que la demanda suba y empiezen a marcar una diferencia entre la situación actual y la que los científicos pronostican. Los países sobretodo los desarrollados deberían de concientizar más a la gente de que es un problema que nos involucra a todos. Alicia Roth 130288